Pese a haber aceptado la invitación para filmar en los Estados Unidos,
Alfred Hitchcock realizó, a cuenta de compromisos contractuales, otra película
en Inglaterra: “La Posada Maldita” (Jamaica
Inn, 1939).
En su último film
inglés, el director adaptó la novela de Daphne du Marier del mismo nombre.
Sin embargo, el nombre no debe engañar, ya que no tiene nada de terror. Cuenta
la historia de Mary, una irlandesa que, luego de la muerte de su madre, parte
detrás de su única pariente: la tía que vive en la costa de Cornualles.
El
día de su llegada, descubre que su tío, Joss, es un pirata que provoca
naufragios para robar la mercadería de los barcos que pasan por allí.
Una
noche, Mary, con un cuchillo, salva la vida de James Traheme, quien había sido
atado por sus propios compañeros que no sabían que se trataba de un policía
infiltrado.
Juntos, ellos huyen y van a pedir ayuda
a Sir Humphrey Pengallon, juez de la región, sin saber que él era el jefe de la
banda.
Sir
Pengallon es un aristócrata quebrado que no acepta su precaria situación y
depende de los golpes de la banda de Joss para mantener su alto nivel de vida.
Pese al lujo que lo rodea, el juez es un hombre bruto y sin ningún refinamiento
en la mesa. En una de sus acostumbradas cenas, para ofender a alguien, afirma
que se parece a un “berries pudding”.
La Posada Maldita fue una
película que no agradó a Hitchcock pese al éxito de público. Llegó a decir que
no había dirigido el film, que apenas lo coordinó. Tal vez eso de deba al hecho
de que ya tenía la mente en Hollywood y su nuevo productor: el gran David O.
Selzick.
Pudin de frutos rojos - Berries
Pudding
Ingredientes
2 cucharas (sopa) de
agua
150g de azúcar
450g de frutos rojos (frutillas, frambuesas, moras, arándanos)
150g de pan lactal sin cáscara
Preparación
Hierva el agua con el azúcar. Agregue los frutos rojos (separe algunos
para decorar) y cocine delicadamente hasta que queden blandos pero manteniendo
sus formas. Escurra y reserve, guardando el agua de la cocción.
Forre con film plástico una budinera.
Empape las fetas de pan lactal en el agua de la cocción y cubra
totalmente el fondo y los laterales de la budinera sin que queden blancos. Coloque
los frutos cocidos dentro y tape con más fetas de pan húmedo. Lleve a la
heladera con algo encima que haga peso. Deje de un día para el otro. Desmolde y
sirva con chantilly o crema y decore con frutas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario